Zetas realizan sacrificios humanos en honor a la Santa Muerte.

MÉXICO- Testimonios de miembros del cártel mexicano Los Zetas detenidos en EU y juzgados en Texas, así como de un agente de la agencia antidrogas de ese pais (DEA), revelaron los rituales y sacrificios humanos que realizan los integrantes de ese grupo delincuencial.
Durante el juicio que se le sigue a Gerardo Castillo, presunto líder de Los Zetas en Texas, el agente de la DEA Chris Díaz, testificó sobre la forma en que éstos brindaron a la Santa Muerte la sangre de un adolescente, asesinado junto con otra persona, presuntamente por ser parte del Cártel de Sinaloa.
En la declaracion del agente, difundida por El Universal, se detalló que un joven identificado como Alfonso Avilés, presunto miembro del Cártel de Sinaloa, fue detenido por sus enemigos (Los Zetas).
"Ellos lo torturaron y terminaron por mantener abierto su vientre, y pusieron la sangre en una copa, para hacer un brindis a la Santa Muerte", explicó Díaz, tras añadir que el destino de Avilés y de otras personas fue descubierto a través de las intervenciones telefónicas que la DEA le hizo a Zetas de EU.
Desaparecen los cuerpos en tambos con gasolina
Dicho testimonio del agente de la DEA, concuerda con lo declarado previamente por un ex integrante de Los Zetas de nombre Raúl Jasso Jr., quien testificó que dos hombres identificados como Inés Abundo Villareal, de 15 años y Alfonso Avilés, de 19 años, que trabajaban para el cártel de Sinaloa, fueron detenidos en un retén cerca del puente internacional de Nuevo Laredo.
Jasso explicó -según El Universal- que otro zeta de nombre Jesús González le pegó en la cabeza a Avilés y posteriormente junto con Villareal fueron llevados ante su supervisor que era Gabriel Cardona, quien actualmente purga una condena superior a los 80 años en Texas.
Posteriormente, prosiguió Jasso, Cardona torturó y mató a Alfonso Avilés y junto con Villareal, fueron colocados en un tambo y los quemaron con gasolina hasta que quedaron hechos cenizas.
El juicio contra Gerardo Castillo Chávez, "El Cachetes", de 25 años de edad y considerado el jefe de Los Zetas en Texas, continuará esta semana al enfrentar acusaciones de crimen organizado y conspiración de tráfico de drogas, además del homicidio de dos personas en la carretera de Laredo.